Blog de Noemí y Joni



"Quiero escribir en palabras de oro una historia de amor,
y compartir con el mundo entero la historia de amor,
entre tu y yo, y Jesús"

dilluns, de setembre 03, 2007

Amsterdam: llegada y acomodación

Buenas, aquí estamos de nuevo después de bastante tiempo.

Y es que cuando ya la mayoría estáis de vuelta al curro, a nosotros se nos ocurre coger un avión y presentarnos en Amsterdam a pasar unos días.

Como está empezando a ser habitual en nuestros periodos de vacaciones, a la familia Martínez-Marín se les ha ocurrido pasar por el hospital. En este caso para que Anna pudiera estar ya con su hermanita Abril. ¡¡ Felicidades !! (Más info en www.elblogdeanna.es)

El viaje hasta esta bonita ciudad fue tranquilo y agradable, si no tenemos en cuenta las turbulencias provocadas por la espesa nubosidad en la zona y la "prueba de frenos" que hizo el piloto cuando vió que se le acababa la pista de aterrizaje y aún no había parado el avión. Previamente una gran experiencia en los buses nocturnos de Barcelona.

Una vez en Amsterdam, y con un mapa en las manos, nos dirimos hacia el apartamento que teníamos concertado. Llegamos a la calle del apartamento (con uno de los numerosos canales de esta ciudad) y empezamos a recorrerla desde el principio en busca del número 142. ¡Menuda sorpresa!: en las tiendas había señora ligeras de ropa en los escaparates. (¡Estos holandeses!).
Justo cuando acabaron ese tipo de establecimientos oimos que una voz de señora llamaba diciendo: "Joni, Joni". Y sí, era la dueña del apartamento que estaba esperándonos y nos avisaba de que nos estábamos pasando de largo.
Así que estamos a dos pasos (literalmente) de algunos de los establecimientos más famosos de Amsterdam. De hecho es una calle muy, muy concurrida por todo tipo de personas: grupos de turistas, grupos de estudiantes, gente variopinta (desde basureros a camellos). Así que estamos entretenidos si miramos por la ventana, y no es nada peligroso ya que es muy concurrida. El apartamento es un loft bastante confortable, así que estamos guay.

Después de acomodarnos nos fuimos a dar un paseo en barco por los canales. Muy interesante para hacerse una idea de la ciudad. Y después paseamos por el centro de la ciudad, identificando todas las tiendas que vamos a "visitar" un día de estos (esto es el paraiso de las compras) y disfrutando un poco de la variedad de gentes y bicis que pueblasn esta ciudad (o que la visitan, porque esto esté lleno de turistas).
Y después de pasar por un supermercado,nos hicimos una cenita (las ventajas de estar en apartamento) y a dormir, que el día había sido largo.

Mañana más. Un besito.